50 kilómetros de recorrido extremo y variado, con puro ambiente alpino y un desnivel que quita el hipo: 4100 mD+.

Partiremos de la concurrida Plaza Aragón de Torla-Ordesa, situada a 1033 m, para ir ganando, poco a poco, los primeros metros de desnivel por un bonito sendero, muy cómodo para correr, que nos llevará hacia el pequeño pueblo de Viu de Linás (1.250 m), donde encontraremos el primer avituallamiento líquido (km 5).

Es el turno de coronar el pico Mondiciero o Litro, que alcanzaremos en una subida sin tregua de 1030 metros de desnivel, primero por sendero y después por prados de alta montaña (tasca en aragonés), donde encontraremos el primer Punto de Control. A partir de aquí, tendremos a vista nuestro siguiente objetivo: el collado que separa los picos Mondiciero y Tozal de las Comas. En este tramo podremos gozar de una de las mejores panorámicas del Pirineo hacia los macizos de Monte Perdido, Vignemale, Tendeñera, el Valle de Ordesa…

Una vez alcanzado el collado, tomaremos la vertiente noroeste en una bajada técnica hacia el refugio d’Abozo, en Soaso de Linás, donde encontraremos el segundo avituallamiento provisto de líquido y sólido, así como el 2º Punto de Control (km 14).

Seguiremos con una subida potente, 1090 mD+ en 4,5 km, que nos llevará a alcanzar el collado de Tendeñera (2700 m, Punto de Control nº3), la parte más alpina y difícil de la carrera en cuanto a terreno. Bajada técnica entre canchales y terreno kárstico, con puro contraste de color entre calizas y areniscas. En este punto, es posible encontrarse con algún nevero que se resiste a desaparecer.

Una vez terminemos de bajar, enlazaremos con un tramo de la Faja Basarán, donde tendremos un pequeño punto de recarga de agua (km 21,5). No os relajéis en este cómodo paseo, ya que enseguida tocará subir por un breve corredor técnico que nos llevará directos al solitario ibón de Ordiso. Desde allí tendremos una bajada de 5,5 km hasta la cabaña del Bado de Ordiso (1603 m), donde encontraremos un ansiado avituallamiento sólido y líquido (km 28).

Tras un pequeño tramo de senda, giraremos a la derecha y remontaremos el barranco del Cardal, por un exigente campo a través, hasta el puerto del mismo nombre, que atravesaremos para dirigirnos al pico Bernatuara por terreno francés (2530 m, 4º Punto de Control). Continuaremos, ya en bajada, hacia el famoso ibón de Bernatuara y de ahí hasta el puente románico de San Nicolás de Bujaruelo (1338 m) donde nos esperará el cuarto avituallamiento sólido y líquido y 5º Punto de Control.

Sin cruzar el puente, seguiremos por la margen izquierda del río Ara, por terreno cómodo y agradable, hasta toparnos con el barranco de los Gabietos, donde tomaremos el sendero a Faixa Guasa. Corto pero bonito tramo, con vistas al pico Otal, con una bajada algo técnica cuando el terreno está húmedo.
Cambiaremos de margen por el puente de Santa Elena y nos dirigiremos al paso de la Escala; corto, sencillo y un poco aéreo, con pasamanos para más seguridad.

Continuaremos hacia el camping San Antón, pero no os dejéis engañar por la vista, no tan lejana, de Torla-Ordesa, todavía quedan 4 kilómetros de pequeñas subidas y bajadas que nos llevarán hasta Peña Piñera, la preciosa pared caliza que guarda las espaldas de esta villa.

Ahora sí, ya sólo nos quedará la bajada por el camino de Laor, que nos conducirá directamente al corazón del pueblo atravesando sus calles empedradas hasta llegar a la esperada y bulliciosa meta.